Distribución de ropa de abrigo

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Con la llegada de los inviernos, las personas sin hogar eran las más vulnerables. Con el fin de consolarlos con la calidez del amor en forma de ropa de invierno, los jóvenes Sai distribuyeron 50 mantas y 50 sudaderas con capucha a los que no tenían un refugio para protegerlos de los duros inviernos.

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Este sevā fue planeado para las celebraciones navideñas, pero al observar las corrientes frías y la necesidad de ropa abrigada, los jóvenes Sai se reunieron y coordinaron la distribución sin esperar hasta Navidad.

A pesar de muchos desafíos, la juventud Sai se aseguró de que sus semejantes, que necesitaban amor, cuidado y apoyo, fueran abrazados con su calidez de amor en forma de ropa de invierno.